domingo, marzo 20, 2011

UN SABOR AGRIDULCE EN EL APOYO DE UNA LIBIA DEMOCRÁTICA (∑π, επ)

Hace muchos años, más de veinte, que estuve en Libia, fue en una visita organizada por el SOC (Sindicato de Obreros del Campo), en aquellos tiempos era un experimento democrático-revolucionario que cabía pensar que pudiera ser interesante. Tengo que confesar que me decepcionó bastante porque no conseguí ver claramente los progresos, todo parecía como hermético, triste y muy controlado. El libro verde no aclaraba demasiado. La noticia, algo descafeinada, de aquellas delegaciones a Libia puede verse aquí.
Han pasado los años y ahora las potencias occidentales han decicido intervenir en solidaridad con los "rebeldes" contra el régimen de Gadafi. Un sabor agridulce me produce la situación actual. De un lado Gadafi decidió, en contra de lo que ocurrió en Tunez y Egipto, reprimir duramente a los movimientos de protesta. Este, al parecer sin la suficiente fuerza para hacer una movilización democrática de masas optó por hacer una resistencia con el uso de la violencia. Finalmente, después de muchos titubeos, la ONU aprueba una intervención, que inmediatamente es ejecutada por Francia y USA, entre otros.
Es de aplaudir que las potencias internacionales impidan la represión del movimiento de resistencia, pero al mismo tiempo da miedo ver a los cazas, que "parecen contentos" de mostrar ante el mundo su capacidad destructiva.  Me gustaría saber que piensan los productores de armamento, ya que por fin aparece este como un angel de la guardia. Esperemos que todo termine bien.
Pero, ¿Podría haberse hecho de otra forma? Seguro que si, pero probablemente, habría que haber empleado otras tácticas, desde hace años. Nunca es tarde para aprender que los medios noviolentos son más eficaces.

1 comentario:

ATT dijo...

¡Comparto tu difícil digestión de lo que está pasando! Pero me pregunto si con alucinados cómo Ghadaffi y su patética descendencia había otra manera... A mi lo que más me escandaliza es recordar cómo hace unos meses todos y todas en Occidente (entre miembros de coalición y "neutros" que no lo son) parecían olvidar que hace muy poco acogían con besos y sonrisas a un déspota monstruoso que ahora, cuando cientos (¿miles?)de libios han sido masacrados, sí se atreven a denunciar... Alfredo