martes, enero 24, 2006

HA NEVADO EN LA SIERRA NEVADA


Todavía recuerdo cuando hace muchos años estaba en Londres conversando con mi madre por telefono que me resaltó como noticia relevante “ha nevado en la Sierra”. Sierra Nevada puede ser contemplada desde muchos lugares de Andalucía. En los días claros incluso desde África. Todos los pueblos de los alrededores, de las provincias de Granada, Jaén, Córdoba, Málaga y Almería, de este macizo penibético ven en ella el reflejo del invierno y de la abundancia, porque el deshielo convertirá el agua en vida, en nutriente humano y de los ecosistemas. Aguas que alcanzarán más allá de la vista a través del Genil hasta el Guadalquivir, Andalucía Occidental y el Atlántico. El blanco brillante de la sierra engrandece la ciudad y magnifica la Alhambra desde el Albayzin.

La nieve nos transmite alegría y nos permite reconocer más claramente el invierno. Una nieve que a veces osa llegar hasta nuestra propias calles y entonces se produce el júbilo de los niños y jóvenes.

Como en los últimos días no he podido hacer fotografías al no coordinarme bien con las nubes, le he pedido a Juanmi que si conseguía alguna fotografía por los foros que visita que me enviase alguna. El resultado ha sido espectacular: una excursión al refugio de la cucaracha (desde aquí agradezco a los que tan gentilmente han compartido con nosotros sus vistas).

viernes, enero 20, 2006

EL AROMA DEL MACASAR NOS HACE MAS CÁLIDO EL INVIERNO


En el jardín de mi casa hay plantados dos arbustos con apariencia de silvestres durante todo el año pero que cuando nadie lo espera, diciembre y enero, nos sorprende con sus flores. Ahora que en Granada estamos cerca de los cero grados nos inunda con una fragancia cálIda, oriental e intensa. Con el macasar (Chimonanthus fragans), originario de China y Japón, el frío se “humaniza” y pierde parte de su sentido.
Aviso para naúfragos y navegantes: que yo sepa hay macasar en el Hospital Real, el Jardín Botánico, en los Jardines del Salón, en un carmen con su nombre, en la plaza del comino en el Albayzin y en un restaurante con el mismo nombre en lo que era el barrio judío de Granada, por encima de la calle pavaneras, por debajo de Torres Bermejas. También en mi casa como ya sabeis.

martes, enero 17, 2006

SUSPENDIDO SINE DIE EL DAKAR


Cuando escribo estas líneas no se si se habrá conformado la suspensión del Rally de Dakar para siempre. Hay suficiente información para que esto ocurra, de hecho se ha suspendido la última etapa. Estoy convencido de que antes o después se tomará esta decisión. Es una desvergüenza lo que ocurre allá en Senegal. A pesar de que desde los confortables sillones de nuestros hogares podamos contemplar los magníficos paisajes, los jubilosos senegaleses ante el polvo desencadenado por los rugientes motores, la realidad sobre el terreno parece ser otra.
El índice de desarrollo humano es en este pais de 0.450 (0.928 -entre paréntesis las cifras de España-) en Senegal, por lo que ocupa el puesto 157 (21). La esperanza de vida de 55.7 años (79.5), la tasa de alfabetización de 39.3 (97.7) y la renta per capita 1.648 dolares (22.391). ¿Para que le sirve este rally a Senegal? Habrá quién opine que es una manera de llevar ciertos ingresos. Pero si se estuviese preocupado por el bienestar de los habitantes de aquella zona hay otros modelos para invertir todo el gasto de forma más armónica.
Las muertes generadas por la carrera, especialmente cuando se trata de niños, es solamente la manifestación más trágica de la manera en que tenemos los europeos postcoloniales de relacionarnos con los paises menos desarrollados. Están puestos ahí para nuestro disfrute, para que los tomenos, independientemente de sus condiciones de vida y de sus expectativas. Nosotros los señores del primer mundo les demostramos nuestra gran “potencia” (¿económica, tecnológica, organizativa, política, cultural?) ante la que no cabe otra cosa que la sumisión.
Por supuesto que la desaparición de este rally irá asociada a la promoción de otras formas de relación y desarrollo como las que preconizan muchas organizaciones e instituciones.

sábado, enero 07, 2006

SOMOS TERRIBLEMENTE AFORTUNADOS POR ESTAR AQUI ...


... y en el "somos" quiero incluir a todos los seres vivos. Llegar a generar cualquier tipo de vida, sea la que sea, parece ser todo un triunfo de este universo nuestro. Como humanos somos doblemente afortunados, claro. No sólo gozamos del privilegio de la existencia sino también de la capacidad singular de apreciarlo e incluso, en muchisimos sentidos, de mejorarla. Este razonamiento esta en la pagina final del libro de divulgación científica "Breve historia de casi todo" escrito por Bill Bryson (Círculo de lectores, 2003). Lo acabo de terminar de leer en estas vacaciones. He disfrutado bastante con el. Todavía conservo un cierto regusto por los temas científicos después de mi bachillerato de ciencias.
Tras repasar los conocimientos sobre la historia del cosmos nuestra fortuna es indiscutible... 140.000 millones de galaxias, 10.000 billones de planetas; ... el sistema solar; la tierra; los átomos -todas las cosas están compuestas por ellos (formando parte de las estrellas y de otros organismos, y que después se "reencarnaran" de nuevo en cualquier ente del universo)-; las moléculas; las proteinas -200.000 tipos en nuestro interior; el ADN, "la molécula más extraordinaria de la tierra" ... la vida; las bacterias que fueron durante 2.000 milllones de años fuera la única forma de vida -1000.000 trillones dentro de cada uno de nosotros-; las células -10.000 billones en nuestro organismo-; cerca de dos millones de especies; ...
Es muy llamativo que esta conclusión -el privilegio de ser humano-, de disfrutar de este grado de complejidad sea claramente percibido por biólogos, genetistas y evolucionistas y sin embargo parezca diluirse en los pensadores sociales. Aunque también esta fuertemente arraigada en sabidurías, filosofías y religiones ancestrales. Es un "lapsus" trágico e imperdonable de los intelectuales. La consecución de futuros mejores depende del reconocimiento de nuestro pasado. Aqui el tiempo nos juega una mala pasada. Un tiempo antropocéntrico vanidoso -medido desde nosotros- que se olvida de que somos parte del universo y nos depara un futuro demasiado incierto. Sin embargo, desde la humildad de nuestra posición en el uni(multi)verso tenemos mayores posibilidades de vivir nuestros conflictos y de convivir con todos nuestros compañeros de viaje.