Esta mañana estábamos hablando Jorge y un servidor de cosas varias, como casi siempre. Hasta el punto de que nos llegamos a acordarnos de como lo hicimos sobre el Don y el Contradón. Puede que fuera sobre la organización Mundial del Comercio (OMC) o sobre la colaboración en los proyectos de investigación. Lo importante es que el Don y el Contradón define procesos de redistribución -dar, recibir y restituir- de los recursos y la riqueza (Véase a Marcel MAUSS en el “Ensayo del Don” -facilitado por Lidón-). Debo de continuar profundizando en esto.
Jorge apuntaba que este era el típico caso del Dilema del prisionero (¿Alguien me puede decir por qué sacó este tema?). Se me ocurrió que podíamos llamarlo de otra forma no relacionada con la crimen y castigo. Ya que existen muchas ocasiones -¿la mayoría?- en que esta dilema se resuelve de forma cooperativa. Aunque dilema tiene un significado bipolar. En una dialéctica pude haber múltiples actores y no necesariamente enfrentados. Por qué no la Dialéctica de la Confianza, como una parte de la Teoría de Juegos matemática. Así parece que suena mejor. A veces los enunciados definen la teoría. Hemos quedado en seguir hablando.
Jorge apuntaba que este era el típico caso del Dilema del prisionero (¿Alguien me puede decir por qué sacó este tema?). Se me ocurrió que podíamos llamarlo de otra forma no relacionada con la crimen y castigo. Ya que existen muchas ocasiones -¿la mayoría?- en que esta dilema se resuelve de forma cooperativa. Aunque dilema tiene un significado bipolar. En una dialéctica pude haber múltiples actores y no necesariamente enfrentados. Por qué no la Dialéctica de la Confianza, como una parte de la Teoría de Juegos matemática. Así parece que suena mejor. A veces los enunciados definen la teoría. Hemos quedado en seguir hablando.
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