martes, enero 29, 2013

FELIZ 4.711 (∑π, επ)

Hace unos días que es Año Nuevo Chino también conocido como Festival de Primavera, comienza el año 4711 y se corresponde con el Año de la Serpiente. La luna sigue jugando con nosotros, con nuestros ciclos vitales e históricos. El año nuevo chino cae en el día de la luna nueva más próximo al día equidistante entre el Solsticio de Invierno (冬至,Dōng zhì, entre el 21 y el 23 de diciembre) y el Equinoccio de Primavera (春分,Chūn fēn, entre el 20 y el 21 de marzo) del hemisferio norte.
Es un período lleno de celebraciones, que se inicia el Día de Año Nuevo y termina con la Fiesta de las Linternas, el decimoquinto día del primer mes. Se suceden visitas a familiares, comidas especiales y fuegos artificiales, los miembros de la familia que viven fuera de casa hacen un esfuerzo especial para retornar al hogar y compartir una gran comida. Esta es la razón por la que los transportes públicos suelen estar saturados durante estas fechas.
Feliz año, felices meses, felices días, al fin y al cabo, sea cual sea estos, comiencen y/o terminen aquí o allá. 

miércoles, enero 23, 2013

HERÁCLITO Y MERCEDES SOSA, TODO CAMBIA (∑π, επ)

Heráclito, un filósofo del siglo V a.C., afirmó "todo fluye" y ha sido visto durante años como un filosofo no-moderno en cuanto que no ... El otro día unos gauchos (en la foto) se aproximaron a la mesa en la que cenábamos en Mendoza (Argentina), cantaban los siguiente:
Cambia lo superficial
Cambia también lo profundo
Cambia el modo de pensar
Cambia todo en este mundo

Cambia el clima con los años
Cambia el pastor su rebaño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño

Cambia el mas fino brillante
De mano en mano su brillo
Cambia el nido el pajarillo
Cambia el sentir un amante

Cambia el rumbo el caminante
Aunque esto le cause daño
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño

Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia

Cambia el sol en su carrera
Cuando la noche subsiste
Cambia la planta y se viste
De verde en la primavera

Cambia el pelaje la fiera
Cambia el cabello el anciano
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño

Pero no cambia mi amor
Por mas lejos que me encuentre
Ni el recuerdo ni el dolor
De mi pueblo y de mi gente

Lo que cambió ayer
Tendrá que cambiar mañana
Así como cambio yo
En esta tierra lejana

Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia
Cambia todo cambia

Pero no cambia mi amor...
Me dijeron que la canción era de la cantante argentina Mercedes Sosa, después averigüé que la canción fue compuesta por Julio Numbauser desde su exlio en Chile ¿Habría leído Julio Numbauser o Mercedes Sosa a Heráclito?. Probablemente no pero si habría tenido la intuición, o la certeza, de que todo cambiaba a su alrededor, algo muy claro en la historia contemporánea de sus países. Estaban en el paradigma de la complejidad.


jueves, enero 17, 2013

ENSOÑACIONES DE SOTILEZA (BOGOTÁ, COLOMBIA, ∑π, επ)

Sotileza es un barrio del NO de Bogotá, de la localidad de Suba. Alli viven mis amigos Carol y Carlos José. Allí soy bien acogido por ellos y me inician en la comprensión y disfrute de la "moderna" Colombia. Mi recorrido vital me hizo estar hace poco en Marruecos, y acompañado de Nouri disfrutar del pais, de sus gentes, de sus anhelos y proyectos y, por que no, desarrollar maravillosas ensoñaciones de Cultura de Paz. Después vinieron el solsticio de invierno y las celebraciones relacionadas con la emergencia del sol. Soñar es gratis, me gusta, es una manera de superar los inconvenientes de la realidad en la que vivo, de imaginar mundos mejores, de fijar puntos de apoyo para caminar hacia otra realidad más justa y pacífica. Probablemente sea imprescindible.
Hace ya casi catorce años que viajo con cierta regularidad para Colombia, desde en principio con acciones relacionadas con la investigación y la construcción de la paz. He participado en la elaboración de varios proyectos con diversas universidades e instituciones. Hay una característica común en todos ellos, son necesarios, se implican personas muy capaces, se trabaja con ilusión, se llevan a la práctica algunas acciones, pero tienen dificultades para estabilizarse. Se me ocurren dos razones para que esto ocurra, de una lado la inestabilidad institucional que hace que los proyectos dependan de los gestores de cada momento, de otro la infravaloración que hacen las autoridades competentes de la Investigación para la Paz que aparece más ligada a las coyunturas concretas que a políticas generales de investigación,  innovación y promoción del bienestar social. Mientras no nos queda otra posibilidad que seguir soñando e intentar que las metas que se nos representan confluyan al máximo posible con la realidad.

sábado, enero 12, 2013

JUGUETES CON DES-PERFECTOS (∑π, επ)

A veces preferimos conservar una visión idílica, casi infantil, de la vida antes que aceptar sus imperfecciones y ser consecuente, para bien o para mal, con ella. Una de las dificultades para reconocer la paz imperfecta es que esta quiebra la idea, utópica, de una paz acabada, perfecta. Me di cuenta siguiendo los comentarios de los alumnos del Master Cultura de Paz en la sede de Córdoba. Me recordó la película Juguetes rotos de Summer. Los estudiantes sufrían porque el juguete de la paz perfecta y todas la felicidad depositada en ella se habia diluido. Pero, en realidad no se trata de juguetes rotos sino con algunos desperfectos, sirven, por tanto, para seguir  jugando con ellos. Al llorar el arañazo del juguete estamos perdiendo un tiempo precioso para jugar con él.

jueves, enero 03, 2013

PALOMAS BLANCAS EN LAS TENDILLAS, RECONCILIACIONARNOS CON NOSOTROS MISMOS (∑π, επ)

Mientras que me tomama un chocolate y un mollete de tortilla de patatas con mayonesa pude comprobar como las palomas de la Plaza de la Tendillas eran predominantemente blancas. Las que yo veo en el Albayzin y en Véles Blanco lo son grises. Utilicé esta imagen en la clase del Master Cultura de Paz para destacar que las acciones de paz podían ser mayoría aunque muchas veces no lo viésemos. Estábamos intentando avanzar en la cura de la esquizofrenia resultante de querer la paz pero pensar en clave violencia.
Habíamos retomado el debate del día anterior sobre la paz imperfecta, costaba trabajo entender que en los espacios adversarios ("enemigos") hubiera paz por pequeñita que fuera, también, contradictoriamente, que la paz no fuese a ser nunca perfecta. Yo dije -se me ocurrió en aquel momento- la paz imperfecta nos reconcilia con nosotros mismos, con nuestro con nuestra especie. Asi es ver paz imperfecta en los espacios mas recónditos del mundo nos permite, a la especie humana, hacer todo ese mundo nuestro, tener capacidad de relacionarnos con él, de quererlo, de tenerle compasión. Saber ver las palomas blancas es una manera de hacerlo.