El 6 del 6

Aunque para la mayoría de la población pasase desapercibido tres hechos de dispar relevancia concurrieron en el dia posterior del «5 a las 5». Paso a relatarlos por orden de importancia.
Este día Ubuntu lanzó su versión 6.06 LTS (Long Term Support). Ubuntu es una palabra africana antigua que significa bondad, amor y compasión hacia los demás. También significa soy lo que soy debido a lo que todos somos. Este nombre y su espíritu ha sido tomado ahora por una nueva distribución informática GNU/Linux. Con lo que se consolida y refuerza todo el trabajo realizado durante años por toda la comunidad del software libre para facilitar el procesamiento y el acceso a la información, el avance de la ciencia y la libre circulación del conocimiento. De acuerdo con su filosofía deberá estar siempre disponible sin costo alguno, y los usuarios siempre tendrán la libertad de adaptar y alterar el software de acuerdo a sus necesidades particulares (entre lo que se incluye el utilizarlo en su lengua materna)
De otro lado, para algunos iluminados y aburridos el 6 del 6 del 66 es el día de la Bestia, del Anticristo, del fin del Mundo, todo eso basándose en un texto del Apocalipsis (del griego αποκαλυψις, Revelación). El significado del número 6, en este libro, es de imperfección (por faltarle una unidad para la perfección del número 7), y el número 666 representaría entonces una imperfección llevada hasta el extremo. (Ap 13, 16-18) "Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis..." Se podría llegar a pensar que representara al emperador Domiciano, que persiguió a los cristianos.
Y por último, ajenos a a estas última circunstancia, y guidado por el calendario Juliano, decidimos celebrar que un número de días, meses y años, daba un número feliz. Un cumpleaños. Amigos y amigas, el vino, el paté y el queso, en el marco inconparable del Paseo de los tristes, debajo de la Alhambra, con el espíritu Ubuntu. Todo junto sirvió para aullentar los malos espíritus, imponernos sobre los malos augurios, disfrutar de la noche y la vida.