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sábado, abril 19, 2008

DIEGO "ETNÓLOGO" RURAL (∑π)

Acabo de regresar de cortarme el pelo. Siempre que puedo lo hago en Vélez Blanco, entre otras razones porque la peluquería está regentada por Diego que es una fuente [los caños de Caravaca están enfrente] permanente de , donde practica unas artes que heredó de Blasillo, aunque ello no le eximió de ir durante muchos años a la vendimia francesa.
Describir las peculiaridades de un barbero es tarea fácil, pero en este caso, se suma su curiosidad por reconstruir la etnografía del medio que le rodea. Especialista en navegar -hasta naufragar- en conversaciones dispares, entre las que se encuentran especialmente las diversas tareas del campo, a las que dedica parte de su tiempo libre.
Hoy hemos estado hablando de los trabajos en el monte (leña, plantas aromáticas, carbón, yeseras, resina, ...). Como me hubiera gustado que lo escucharan mis alumnos de primero de Historias, para que comprendieran mejor, de lo que lo hacen consiguo, las condiciones de vida de las comunidades urbanas-agrarias-recolectoras, hay mucho que aprender de ellas.

domingo, abril 08, 2007

EL DIVÁN DE LA CHIRIPA I (∑π)

Diwan es una palabra árabe de origen persa que significa reunión; consejo islámico que determinaba sobre asuntos públicos; también colección de documentos, en particular de poesías (tal como el Diván del Tamarit de Federico García Lorca, Gacelas y Casidas. Por favor leer.); y, finalmente sofá sin respaldo y con almohadones sueltos (en particular el del paciente que relata sus experiencias al psiquiatra).
Chiripa es literlamente suerte. Por curiosidad parece que en la casa de Vélez Blanco, desde la que escribo, hubo en los años 20 del siglo pasado una «Agrupación obrera de asuntos varios» llamada «La Chiripa».
El Diván de la Chiripa pudiera ser la reunión de la suerte. La dicha de estar aquí sentado, delante del ordenador, y que te visiten, te den conversación y te acompañen.
Todo esto es lo que paso ayer cuando aparecieron Alba, Ester y Helena. Después de unos minutos..., de acicalamiento, estaban preparadas para celebrar por todo lo alto la «resurrección». No hay más que verlas. Antes de salir a la calle, por chiripa, subieron a despedirse.